CONGELACIÓN RÁPIDA : Esta fue de las primeras formas de presentación de los productos de Piscicultura, mirando principalmente hacía
la exportación. Se trata normalmente de una congelación de tipo rápido. La congelación retrasa la actuación de los microorganismos
causantes de la alteración del pescado, que no se reproducen a menos de 10 ºC y las reacciones químicas y enzimáticas se desarrollan
muy lentamente. La calidad del congelado depende de la velocidad y temperatura alcanzada: zona crítica de 0º a -5 ºC (ultracongelado
en menos de 2 horas).
Las Productos de Piscicultura se presentan enteros, envasados en bolsa de plástico, en cajitas de cartón, con
una o más piezas o simplemente a granel, en grandes envases capaces de mantener la congelación durante varios meses, etc. El toque
final, en cuanto a presencia y conservación, suele ser glaseado, que da un aspecto de frescura y de inmediatez de preparación.
La
Tenca Congelada por los procedimientos criogénicos modernos, y conservada a –18 ºC, tiene una estabilidad en su calidad hasta de cuatro
meses. Esta temperatura es la utilizada normalmente por la industria.
Para su conservación por períodos más largos, la temperatura
ideal es la de –24 ºC sin alteración de las cualidades propias de la Tenca. El proceso de congelación rápida se realiza :
1º) en túnel
de convección forzada, continuo o discontinuo; 2º) en armario de placas, horizontal o vertical ;3º) por el método de inmersión ; 4º)
mediante líquidos criogénicos
EVISCERACIÓN : Cualquiera de las formas mencionadas en la presentación de los productos piscícolas,
distintas de la entrega en fresco y entera, requiere previamente un trabajo de evisceración, es decir, de eliminación de todas las
vísceras del pez que no tienen ninguna aplicación en el consumo normal del pescado (eliminación que a veces va acompañada de la supresión
de cabezas, aletas y pieles). Este trabajo puede realizarse, por operarios a mano, utilizando instrumentos de corte adecuados. Actualmente
se hace mediante el uso de evisceradoras, de las que el mercado ofrece variedad en tipos, modelos y diversidad de presentaciones y
garantía sanitaria. Existe un modelo de evisceradora denominada manual, ya que la labor sigue haciéndose a mano, pero sustituyendo
los cuchillos o cortadores tradicionales por cuchillas especiales y compresores para abrir el vientre y corte o separación de la cabeza.
El conjunto va montando sobre mesas de material inoxidable, y fáciles de limpia, acompañadas de bomba de vacío, más sistema de aportación
de agua para lavado y aseo del equipo.
Se fabrican modelos de evisceradoras muy sofisticados, automáticas, con distintas prestaciones:
consumo de agua, conexión eléctrica, compresor, capacidad de rendimiento (unidades por minuto), aplicables a distintos tamaños de
Tencas, posibilidad de eliminación de agallas, etc. Partiendo, pues, de este requisito previo, las Tencas quedan preparadas para realizar
con ellas las labores de transformación que requiera el mercado
FILETEADA : Esta forma de presentación, ha sido un acierto con vistas
al ama de casa. Su aceptación lleva una curva progresiva realmente alentadora. Los Filetes, generalmente con piel, pero desprovistos
de toda clase de vísceras, de cabeza, aletas, espinas, se presentan de diversas formas; las más utilizadas y aceptadas son en filetes
individuales o en mariposa, es decir, ambos costados unidos por el lomo que, extendidos, presentan el aspecto que les da el nombre.
El Fileteado se ha venido haciendo, sobre todo en Piscifactorías de producción reducida, a mano, por personal especializado y diestro.
Posteriormente fueron apareciendo máquinas fileteadoras, de gran capacidad y rendimiento; pero, para una mejor presente ante el consumidor,
es muy aconsejable un repaso manual del producto obtenido mecánicamente.
AHUMADA : Desde hace siglos, se realiza la práctica del ahumado
de productos del mar en muchos países. En Europa, lo que respecta a la experiencia española, se hicieron famosas las diversas formas
de presentación elaboradas en los países escandinavos, con proyección internacional. En la actualidad, y siguiendo técnicas muy depuradas
como consecuencia de investigaciones y prácticas de laboratorio, la Piscicultura ha entrado con buen pie por este sendero. Después
del salado, se somete el pescado a la acción del humo de madera no resinosa. Como consecuencia de la interacción de la sal con los
componentes del humo (ácidos, alcoholes, etc.), se modifica el color, olor y sabor del pescado, al tiempo que se produce una deshidratación
parcial de los tejidos del pez y se modifica su textura.
Las formas de presentación también son variadas: en filetes o en planchas,
piezas completas evisceradas, y como forma especial que tiene gran aceptación por su exquisito sabor, enlatada, filetes en tarrinas
con un soporte de aceite de oliva, de diversas capacidades, para consumo individual o, en envases mayores con destino a los establecimientos
de comidas, como bares, restaurantes, etc.